Tuesday, September 07, 2010

De viejos y nuevos hábitos...

Mick Jagger canta, marcando bien su acento británico, mientras Alfie suelta las ultimas sentencias de su reflexión final. El plano de cámara nos permite ver como el protagonista se retira caminando, cada vez más pequeño, volviéndose a cada paso más minúsculo, a cada paso más sumergido en la inmensidad de su intranquilidad interior. Mientras Mick sigue cantando “Old habits die hard”, me quedo quieto mirando los créditos, la inmovilidad dura unos segundos de esos eternos, de esos que se rompen por miedo a la perpetuidad de esa condición. Me movilizo para quitar el dvd, y pienso en la urgencia de tener una botella de whisky en casa.

En estos días vi las dos versiones de Alfie, cine continuado, todo el mundo vio la versión de Jude Law pero desconocen la versión original (1966) interpretada por Michael Caine. Si bien tengo las dos versiones hace dos años casi, cortesía de un amor de esos que marcan más allá del desenlace de la historia, nunca había visto la versión original. Me repito si comento que el argumento de la película me hace reflexionar mucho, en ambas versiones la reflexión del final, tan bien actuado, funciona como sesión de acupuntura en el alma, uno va sintiendo como los alfileres se van clavando uno a uno, fijando el alma al cuerpo, para que no escape, para que quede presa en la cárcel de carne y huesos.

Mick Jagger sigue cantando, la banda de sonido de la película es muy buena, mientras trato de encontrar la forma de liberar, de algunos alfileres por lo menos, a mi alma, pienso que es una noche para empezar a fumar, un poco de humo le vendría bien a la escena que construyo. Por momentos me conozco tanto, que intuyo que te vas a aparecer en mis pensamientos, que inevitablemente la película, la música, la noche, me llevara a pensar en vos. Tanto me conozco, tanto quiero conocerte, que me pregunto si llegara el día que abandonemos por un momento nuestros miedos, el día que mirándonos a los ojos verbalicemos esto que nos pasa, que imitemos a nuestras manos,

siempre tan vuelteras a la hora de desprenderse una de la otra, si llegara el día en que mi lengua dejara caer entre mis labios esas palabras que hace tanto no se dicen, tanto que ya no se recuerda como suenan, si caerán los te quiero, los te necesito, los no te vayas, los estoy acá...

Old habits die hard, hard enough to feel the pain, we havent spoken in months, you see i´ve been counting the days” sigue taladrandome Jagger, decido que no sera la noche donde comenzare a fumar, y mientras espero el estribillo para sumarme al canto, libero me ultimo suspiro pensando en vos y me derrumbo en la cama...



La recomendación de hoy es Ramón Palomares (1935) este escritor venezolano ganador de múltiples premios por su obra, es uno de las grandes poetas actuales en lengua castellana.



Más Allá De Nosotros

Conversaciones que venían
Hoscas
Buscándonos
Gentes del sueño y Gentes del Viento
Árboles ventosos y golpes en el corazón
Y al cabo estábamos volando
conversando
Árboles ya y gentes del sueño y vientos
con el alma errada y un errante árbol
Furiosos, Incorpóreos,
dando vueltas en torno a la vida
y desentrañándonos
desentrañándonos
Más allá de nosotros.



1 comment:

LaMalaprendida said...

Impresionante tu síntesis, ¡relatas excelente!
Me dan ganas de decirte, "volvé a ese amor" pero no soy partidaria de los regresos.
La onda será dejarse llevar, "y que sea lo que sea..." creo que el miedo viene con el involucramiento y no es poca cosa. Involucrarse cuesta y esta bueno, pero ¿quién y cuándo se marca ese punto de inflexión que hacen de unos besos, al principio insignificantes, un terrible amor después? A veces soy tan escéptica que ni siquiera quiero conocer, para no pasar por esos miedos.
Es arrojarse al vacío.
Barajar, dar de nuevo y jugar.
¡Habrá que jugar Ciru!

Me gustó mucho que me hayas hecho reflexionar.