Wednesday, December 26, 2007

Buscando indicios...

Le alcanzo para ilusionarse, le alcanzo para sentirse vivo, tan solo un instante, le alcanzo para tener por que sonreír por las mañanas. Pensaba todo eso, y más, mientras caminaba de regreso a su casa, la parada del subte parecía más lejana que los demás días de la semana. Claro estaba que, en los días anteriores, había estado ella, ese ángel esperanzador rondando sus horas.
Salto, de uno en uno, los escalones que lo hacían descender a la estación del subte. Camino hacia su punta preferida, respiro profundo, y sentía que no estaba traspirando sino llorando por los poros, sentía que los ojos no alcanzaban para descomprimir tanta angustia, sentía que el cuerpo había tomado la correcta decisión de llorar por los poros. El viaje duro lo que todos los días, sin embargo se hizo más tedioso que lo rutinario. El vaivén, del cansado vagón de madera, lo hacia recordar a una película de ficción, una película que trataba sobre el infinito.
Saliendo del subte, una bocanada de aire fresco le golpeo el alma, los pensamientos se fueron encadenando, saltando de una película a otra, de un recuerdo a otro, siempre la misma sensación, la sensación de estar condenado a seguir recorriendo el mismo sendero.
En la parada del colectivo reinaba la soledad, esa compañera de los últimos años, así que se sintió en un lugar cómodo, como en casa con amigos, y soltó unas lágrimas. No se sintió para nada aliviado, la falta de respuestas lo seguía angustiando. Llego el colectivo, subió y se acomodo en los asientos del fondo, se colgó los auriculares y empezó a mirar por la ventana. El colectivo avanzaba, él luchaba por no caer vencido por las tropas del cansancio. Pero cuando las tropas estaban entrando triunfantes a la ciudad de los sueños, una maniobra brusca del chofer les saco el triunfo, y él se encontró, mirando de frente, a lo que podría ser un principio de respuesta.
Por la ventana del colectivo se veía, lo que fue un Video Club, entre rejas oxidadas, carteles de “Se Alquila” y fotos de viejas campañas políticas, se asomaba el afiche de una película, que él amaba, con su respectivo slogan publicitario. El afiche estaba monopolizado por la imagen de la protagonista, abajo su nombre, y bajo él, el slogan. Se quedo pensando en la frase, y pensó en volver a ver “Amelie, va a cambiar tu vida”…




Wednesday, December 05, 2007

Mi visito un poema de Nicanor...

Hoy desperté, y lo primero que se me vino a la mente, fueron unos versos de Nicanor Parra. Dude si eran tal como los repetía, así que, sin lavarme la cara, recorrí el caos de mi habitación buscando el libro. Era obvio que no lo iba a encontrar (pero encontré un libro de Zizek que tengo que devolver, vos sabes), me prepare el desayuno, mates en soledad, mientras mi mente no paraba de jugar con ese poema. La duda central giraba en torno a un verso, yo recordaba “El corazón no debe pensar”, pero cuando recitaba esa parte, un mar de dudas me conquistaba.
Desde que me tope, casi de casualidad, con la obra del poeta chileno, sus poesías me invaden. Nicanor es el poeta del caos, del desorden, como no me va visitar a mí. Vivo en caos, nado en el desorden que me impuse y del que tanto me cuesta salir. Caos y desorden, angustia y soledad, el salón de baile, de mi vida, se llena de macabras parejas.
El día siguió, así como la repetición, con duda, del poema de Nicanor. Nade un rato, en el caos de mi día a día, en cada bache que la rutina me presentaba luchaba contra la duda “El corazón no debe pensar”…me seguía haciendo ruido, me seguían conquistando las dudas.
Cuando la rutina diaria vio llegar su final, logro hablar con ella, por un instante veo todo claro, por un momento salgo del mar de dudas, del caos, del desorden. Me trenzo con las palabras, quiero elegir las correctas cuando hablo con ella, me sumerjo en el lenguaje, me abrazo al habla…de repente la revelación…”El corazón no sabe que pensar”, así escribió Nicanor. Así vive mi corazón, no sabe que pensar…pero quizás el amor le pueda dar algunas respuestas con respecto a vos…


APROVECHO LA HORA DEL ALMUERZO (Nicanor Parra)


Aprovecho la hora del almuerzo
para hacer un examen de conciencia
¿Cuántos brazos me quedan por abrir?
¿Cuántos pétalos negros por cerrar?
¡A lo mejor soy un sobreviviente!

El receptor de radio me recuerda
mis deberes, las clases, los poemas
con una voz que parece venir
desde lo más profundo del sepulcro.

El corazón no sabe que pensar.

Hago como que miro los espejos
un cliente estornuda a su mujer
otro enciende un cigarro
otro lee Las últimas noticias.

¡Qué podemos hacer, árbol sin hojas,
fuera de dar la última mirada
en dirección del paraíso perdido!

Responde sol oscuro
ilumina un instante
aunque después te apagues para siempre.

Thursday, November 22, 2007

Post Caotico...como los últimos días...



Entrar a un bar, escuchar mil voces, escuchar mil orígenes, mil destinos y solo pensar en que no entras conmigo. La noche avanza, las charlas se suceden, los amigos rotan pero la idea de que estarás haciendo sigue latente, como el pensar si mi persona habita tus pensamientos aunque sea una insignificante porción de tiempo.
El caos de pensamientos, reinante en mi vida, hace que mi ser se llene de dudas, un mar de dudas donde solo flota una certeza…certeza sustentada en sentimientos, en situaciones (mínimas), te vi, y el reino que me rodeaba quedo detenido, hable con vos, y tus palabras se fundieron en mi memoria.
La noche se hace caos, nadie sabe que día empieza, y que día termina el fin de semana, la caravana sale con rumbo desconocido, yo me detengo un instante, y envió un mensaje a toda mi agenda, “que hace la gente los domingos”, esperando que algún día encontremos la respuesta juntos.

Thursday, October 25, 2007

Charla impensada...

Qué locas son las cosas
que al alma se le antoja
conservar…

Me hicieron varias personas la misma pregunta, varias amigas en común me consultaron sobre esa posibilidad, como si existiera. El planteo era siempre el mismo, me consultaban, más bien buscaban mi aprobación, sobre la chance de reunirnos para hablar, para tomarnos un café y aclarar cosas.
La verdad es que, si bien dude al principio, no se bien de que hablaríamos, me acuerdo de algunas, para mi pocas, cosas de “nuestros tiempos”. Me acuerdo del olor de tu habitación, me acuerdo del alivio que sentí, al doblar la calle, la ultima tarde que pasamos juntos, me acuerdo que nos gustaba caminar de la mano, me acuerdo que te encantaba hablar, me acuerdo que me encantaba caminar callado. Me acuerdo de tu cara por las mañanas, me acuerdo de bailar Sting en piyamas, me acuerdo de mis llegadas tardes, eternas, y tus enojos, eternos también. Me acuerdo de tus celos, me acuerdo de tu interés por el futuro, me acuerdo de mi desinterés por todo, menos por vos. Me acuerdo del día que te vi sonreír por primera vez, me acuerdo como se me arrugo el alma la primera vez que te hice llorar. Me acuerdo como me cuidabas cuando me enfermaba, me acuerdo con el amor que me ponías la bufanda en noches frías.
Me acuerdo de esas cosas, y por eso digo lo que digo. Pocas cosas tendríamos para hablar, por lo menos por aclarar, fue una historia hermosa, fueron años muy lindos, pero fueron y no son, lo digo con la serenidad de aquel que en su momento dejo todo, hasta el cansancio…

Después de todo el tiempo que pasó
ya sé que no hay encuentro entre los dos
Esta canción es tuya,
guárdala antes que huya
como vos

Wednesday, October 10, 2007

Se parece a Amelie...

En un día normal de trabajo, pasan por mi oficina entre 15 y 20 mujeres, de entre 18 y 27 años. Suelo entablar diálogos, de diversa índole, con todas ellas, sé que estudian, sé su estado civil, sé casi todo de ellas. Practico mi deporte preferido con la mayoría de ellas, y ellas lo hacen conmigo, la histeria en la oficina llega a niveles nunca conocidos, por el hombre promedio.
Pero hace unos días, paso algo, que marco mis siguientes horas, mis actuales horas. Era un día, de esos donde la locura, esta por dominarnos a todos, llamadas, visitas, faxes, mails, entrega de materiales, todo a la vez. Tenía en el lobby, de la oficina, a seis de las chicas mas lindas de la agencia, son del tipo que llamamos A+, chicas que superan el 1,70, muy bellas. Estaba enroscado en un dialogo con ellas, cuando sonó el timbre, era una de las chicas “nuevas”, que venia a buscar materiales y papeles para empezar a trabajar, su primera acción promocional. Ella tiene 19 años, la recomendó otra promotora de la agencia, la entreviste un día medio caótico, pero me pareció que daba con el perfil de lo que veníamos buscando.
Abro la puerta, y la veo distinta, su look era otro, se lo comento haciéndole un chiste, se sonroja. Ella se queda parada, al lado de la puerta, yo, inmerso en mi caos, no lo noto, las chicas la invitan a sentarse, Ella no acepta la oferta de manera cordial. Me la quedo mirando, Ella agacha la cabeza, pero no así la mirada, me mira desde abajo, le digo que esta muy linda con su look bohemio, Ella piensa que la estoy cargando.
Lo que ella no sabe, es que me encantan las mujeres que se arreglan lo justo, amo las mujeres en zapatillas de lona, amo a las mujeres con look bohemio, amo a las mujeres que no son concientes de su belleza, amo a las mujeres tímidas, amo a las mujeres con intereses artísticos, amo a las mujeres observadoras, amo a las mujeres que se ríen con toda la cara…
Le entrego los materiales, se va…me quedo con las seis chicas bellas, pero con una sensación de vació…en una semana la volveré a ver…

Saturday, September 08, 2007

Pasos lentos...

Se acerco a la barra, pidió, su habitual, Campari Orange. Se apoyo medio de costado, sobre un brazo, para poder ver el ambiente. Le encanta observar, imaginarse historias, bosquejar perfiles, antes de iniciar cualquier conversación, Él, observa.
Se alejo de la barra, caminando despacio, como calculando los pasos. Se choco, sin querer, con una morocha, que no superaba el metro setenta, pero que con su actitud superaba a muchas, Él pidió las disculpas, necesarias por tanta torpeza, La Morocha las acepto pero con una condición, tenían que bailar un tema movido, Él, acepto gustoso, le encanta bailar. Quedaron en buscarse, cuando sonara el tema indicado.
La noche avanzo, charlas efímeras, tragos, histeria, humo, otro sábado a la noche. Él se iba olvidando de su promesa de baile, seguía en su juego de sábado a la noche, se reía, observaba a su alrededor, sus amigos lo acompañaban, todos juegan el juego de buena manera. Cuando empezaba la danza de saludos de despedida, con promesas de llamados al día siguiente, con la misión de pasar, de la mejor manera, el peor día de la semana, se acerco de manera decidida La Morocha, le toco la espalda y le pregunto si tenia palabra, Él ama a las mujeres que saben lo que quieren, así que bailaron, un tema, dos, tres, bailaron hasta quedar casi solos en la pista.
Cuando la retirada era inminente, La Morocha le dijo, susurrándoselo al oído, que lo venia observando hace varios sábados, que le parecía una persona cautivante, que le encantaría irse con él…
Así que ese sábado, se termino el juego… o empezó uno nuevo?

Saturday, August 25, 2007

Desilusion...

A veces solo siento que no pertenezco a ciertos lugares…
A veces mi alma pide a gritos alejarse de mi cuerpo…
Todo el tiempo me hago ilusiones, todo el tiempo me desilusiono…
Algunas personas me generan rechazo repentinamente…
Todo esto me paso a tu lado…Hoy

Monday, August 20, 2007

Una mañana como tantas...

Me levanto con dolor de cabeza, que me recuerda lo agitado de la noche anterior, chancleteando unas zapatillas me dirijo a la heladera, ninguna cantidad de gaseosa de lima-limón apagara la hoguera que siento por dentro. Me desparramo en el sillón, un tibio sol me pega en el cuerpo, meto la mano en un bolsillo del jean, abro mi celular, y leo un msj de ella, “espero que descanses bien, fue una noche mágica, el tiempo con vos se resignifica”, me rió, le encanta decir palabras que repito constantemente, lo hace para mostrarme que me escucha con rigurosidad.
Recorro mi casa, desde el sillón parece más grande, la imagen de un paquete sobre la mesa del comedor me llama la atención. Me dirijo al paquete, veo que lo enviaron por correo, leo el remitente, no me agrada lo que leo, lo agarro y me tiro de nuevo en el sillón. Juego con el envió, lo giro, lo recorro con la mirada, tejo conjeturas, imagino contenidos, todo este juego me angustia.
Estoy por abrirlo, cuando el celular me anuncia, que alguien se quiere comunicar conmigo. Es Ella, la que la noche anterior me hizo quedarme en silencio, unos eternos segundos, cuando me pidió que la abrace, la que me hace regalos a un mes de mi cumple, la que tiene como mascota un conejo y me cuenta seria que lo tuvo que llevar a un especialista en conejos, y se ríe apenas termina de escuchar lo que dice.
Atiendo, quiero hablar tranquilo, así que me dirijo a la pieza, camino a ella, dejo el paquete que me trajo el correo en el tacho de basura…

Corazón coraza

Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza

porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro

porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no.

Monday, August 13, 2007

Bitte geh nicht fort...

Un sábado se encontraron desvelados y se pusieron a charlar. Ella le contó de su pasado, de su presente, que no buscaba una relación, Él le contó de su presente y que le encantaba sumar anécdotas. Quedaron en verse al otro día.
Durante el transcurso del domingo, intercambiaron msj y cerraron la reunión. Ella pasó el día con sus padres, haciendo compras más que interesantes, Él pasó el domingo con una amiga viendo películas. Él, se tomo el tren a las 21.20 con la idea reinante de que Ella no iba a presentarse a la cita, llego a Caballito, camino unas cuadras y la vibración de su celular lo saco de su calma caminata, era Ella, estoy en la puerta, entro o te espero acá, Él le dice, espérame en la puerta, y en el preciso instante que dice eso, se acuerda que Ella estaba resfriada, así que apura el paso.
Él llega al lugar, hace contacto visual con Ella, que lo espera sentada en un escalón. Están ahí, frente a frente, sobran las palabras, se saludan, Él la invita a pasar. Una vez adentro, Ella pedirá un sándwich de caprese, Él, arroz oriental, comerán, hablaran, se reirán, se tantearan, se medirán, se quedaran en silencio, dejando el lugar para el más dulce de los besos, el primero. Luego seguirán, más besos, miradas a los ojos, y una invitación a retirarse, Él va a aprovechar que Ella se levanta al baño y pagara la cuenta, Cuando ella llega se marchan.
Afuera llueve, una tibia llovizna, de esas que no molestan, empieza a cubrir sus cuerpos. Él la abraza y caminan pegaditos. Hablan, se abrazan, avanzan. Se besaran contra una pared, y Él podrá recorrer con sus manos lo bello del cuerpo de Ella, que le susurra al oído que lo quiere tener ya.
Llegan al lugar que será el escenario la pasión de ellos por unas horas. Se desnudan con paciencia, se besan de la misma manera, como disfrutando cada unión de sus labios. En las siguientes horas Él podrá ver la belleza de Ella desde muchos ángulos. Ella lo sentirá temblar, Él la sentirá temblar.
El se acordara que Ella esta enferma y con una toalla le secara el sudor, que para este momento, cubre todo su cuerpo. Después de pasado el temblor de ambos, se quedaron quietos, abrazados, acariciándose, besándose, hablando. Ella le agradecerá por todo, Él le agradecerá por todo, y de vuelta a la pasión, un ultimo aliento, Ellos dejaran todo esa noche.
Se visten, se besan, se retiran. Afuera sigue lloviznando, caminan abrazados y hablan de sus cosas, del laburo, del estudio, de los amigos. Ella se toma un taxi, Él espera un colectivo.
Cuando ella llega a su casa le manda un msj a Él para avisarle. Él lo recibe, mientras mira llover con la cabeza pegada a la ventanilla del colectivo, en sus oídos suena música, Ella esta sentada en la PC escribiendo esta misma historia.

Monday, August 06, 2007

Caminando con frio...

Quiero emborrachar mi corazón
para después poder brindar
"por los fracasos del amor"...


Camino con las manos en los bolsillos, con una mano apretó el celular, con la otra, me saco los nervios jugando con monedas. El viento me enfría la cara, y no puedo parar de pensar en el mensaje que me hiciste llegar, me gira por la cabeza la idea de que pudimos vivir eso, que te esta pasando, juntos.
Es increíble como el pasado se mezcla con el presente, y como el futuro no termina de llegar nunca. Me llego tu msj, me puse de mal humor y trate mal a la que podría ser el futuro. Todo junto, todo en escasas horas. El frió sigue haciendo su trabajo, parece una buena noche para empezar a fumar, pero nunca me gusto el sabor del tabaco.
Cuando estoy a segundos de irme a dormir, me llama un amigo, me invita a su depto, charlar con alguien que sé que me puede entender, o por lo menos escuchar (a veces solo basta con eso), me seduce, cambio de rumbo. Una vez en el ascensor, me miro en el espejo, el reflejo no me agrada nada, odio ser tan obvio por momentos.
Ya dentro del depto, encuentro el calor de la amistad, el sacarme de tema me ayuda, vemos Héroes, nos unimos con nuestra infancia y no paramos de reírnos, la noche parece repuntar. Mi amigo, me tira la idea de bajar a tomar algo, al bar de siempre, acepto la invitación. La verdad, es que me dieron ganas de hacer un brindis, por lo que fue, por lo que no será, y por lo que vendrá…es hora de cerrar una historia para siempre, es hora de que los que me rodean me vean sonreír…

Foto: http://www.pablobravo.net

Sunday, July 29, 2007

Historia por completar...

Se descubrieron de casualidad, una seria de hechos fortuitos reunidos por el destino, los unió parados, uno al lado del otro. Él tomo la iniciativa en el dialogo, era su forma de evitar que le hagan preguntas que no sabia como responder, ella respondió a todo, con una sonrisa al final de cada respuesta, el grupo era grande, pero para él solo existía ella, con su sonrisa, arma letal que vencería al más temible de los ejércitos.
Las charlas pasaron por los temas más variados, música, ropa, ex parejas, crisis energética, frió polar, todo tema servia para conocerse un poco más. Él sintió la necesidad de pedirle un dato, para asegurarse al día siguiente que ella existía, ella le dio el mail, que él memorizo de manera perfecta.

El dialogo siguió de manera virtual, la noche los reunía, a cada uno en la comodidad de sus hogares. Se contaron muchas cosas, y a él le gustaba cada día más. Claro que es una pena no saber que pasaba por la cabeza de ella, esta es una historia que por el momento solo tiene una versión. Él sueña con que ella un día, recostados en un sillón, reconstruya su parte de la historia. Cuando esto suceda, la historia estará completa, porque estas historias se construyen de a dos, así se completan, y así se convierten en las historias más lindas para contar...

Tuesday, July 10, 2007

Historias que me llegan...


Refugiado en mi cama, que solía ser nuestra cama, miro el día de reojo y no lo quiero abrazar. Sé que recorrerlo, será recorrerte, pero sin posibilidad de tocarte siquiera. Si prendo la radio, la música me hablara de ti, me traerá imágenes de momentos juntos. Caminar por la calle, será caminar por los lugares donde lo hacíamos de la mano.
Hoy me fundo en mis sabanas, ayer lo hacia en tus brazos. Mi casa tan silenciosa me duele, tus movimientos torpes, ayer la llenaban de ruidos, de tropiezos, de risas espontáneas. Pondría música, pero todos los cd tienen una historia, toda la casa esta llena de recuerdos tuyos, y cuando los recorro, o me sorprenden, me invaden los miedos, el saber que no volverás, el saber que te llevas todo tu ser a otro rumbo, que otro recorrerá los lunares de tu espalda, que tanto odias y yo ame tanto.
Me abrazo a mi almohada, y me doy cuenta que me sobra una, me la quedo mirando, sabiendo que tu rostro nunca mas se apoyara en ella y no podré deleitarme con tu belleza al dormir. Belleza que explotaba al despertarte y sonrojarte porque te sentías observada. Nada volverá, todo se perdió, no lo supimos cuidar y se fue desvaneciendo, se fue perdiendo en el tiempo, dejando un camino de recuerdos regados por mi casa, y hoy estos, me persiguen, me atan a un ayer que miro con nostalgia, me hacen mirar al hoy con desconfianza y al mañana con miedo. Ya no te tengo, te deje ir, te perdí, hoy prefiero seguir durmiendo un poco más...



Monday, July 02, 2007

Otro camino, el mismo sentimiento...

Subí al auto de mala gana, sin grandes expectativas. En el fondo, sabia que el dialogo, que estaba por empezar, poco iba a cambiar. Una vez arriba, después del saludo cordial, tire mi campera en el asiento de atrás. Permanecimos en silencio un tiempo prolongado, el auto solo avanzaba, dejando atrás las cuadras, parecías querer dejar atrás algo imposible de eludir.
Mis ojos estaban clavados en el camino, mientras mi mente buscaba, desesperadamente, la forma de empezar el dialogo. Nunca lo lograria, porque interrumpiste el silencio con una puteada, Sos un pelotudo y lo sabes, me quede mirandote en silencio, quería ver hasta donde llegabas antes de empezar mi defensa. Mandaste a la mierda todo, años de relación, lo incomodo que va a resultar salir con el grupo, seguiste, y tus frases sonaban una tras otra, sin conexión, por momentos parecía que no las pensabas, solo las decías.
Permanecimos en silencio un momento más, unas lagrimas recorrían tu rostro, y de nuevo tus frases, rompieron el silencio, no vas a decir nada, que hacemos, no paso nada, seguimos como si nada, me permití hacer un gesto, similar a una sonrisa, una mueca, y estallamos en risa, juntos, como si de golpe nos invadiera a ambos la sensación de lo absurdo que era plantearse un dialogo así. Al fin y al cabo, la noche anterior habíamos amanecido en besos.
El auto siguió avanzando, mientras nuestras miradas se cruzaban cómplices y nuestras bocas, esperaban cada semáforo en rojo, para unirse en el ritual más sagrado del amor, el beso. Cuando el viaje iba llegando a su final, rompiste el silencio de nuevo, ¿se los decís vos o yo?, son nuestros amigos, tienen derecho a saber que nosotros no somos amigos desde ayer. Me permití sonreír de nuevo, sos increíblemente hermosa cuando estas nerviosa, les digo yo, igual creo que fuimos demasiado obvios, te dije, con la certeza de que un amor así, no se puede disimular...

Les dejo la recomendación de la semana, cortesía/sugerencia de Daniela de la Cruz (amiga talentosisima, subiré algo de ella pronto). Se trata de Nicolás Antonioli, nacido el 19 de enero de 1985 en Florida, Argentina. Nicolás pertenece a una novísima generación de poetas, de la que ya hablare en próximos post. Aparte de la poesía, este talentoso joven, transita el camino del cuento, la novela, leyendas urbanas y letras de Tango.


Reencuentro

los principios del regreso para carcomerse
han claudicado en el póstumo avance
se desliza bajo la puerta
excrecencias de alrededores
un presunto segmento de lo audible
la mugre de lo inhumano de lo corporativo
la prostitución que delimita el culto
cada personificación que termina
al caer el alcohol sobre los condones
trozo de lo que no se desprecia
mientras se usa mientras se evaden
las leyes de la física cuántica
con el perpetuo avance
de fanáticas costas
que de torpes soldados
embargados por la grandilocuencia
de los organismos multicelulares
lo que se duerme sin cerrar la vista
para devorar su propia psiquis
su propia prosapia
que uña tras uña
revuelve los vidrios y las cáscaras en desuso
rasguños de espaldas que se resuelven



Wednesday, June 20, 2007

Mi primera Casa, mi casa-abrigo...

La casa era todo frente, dos ventanas inmensas absorbían todo el calor, que daba el sol por las tardes. La puerta, de madera, parecía gigante para cualquier niño, que se animara ha atravesarla.
Sonaba música, la mayoría del tiempo. En el grabador Hitachi, había que poner un papelito, en la tapa de la cassetera, para que no se enganche la cinta. Secretos que fuimos aprendiendo, como acercar una silla, a la heladera, para llegar al preciado aparato, revolver en la caja de cassetes, muchos de estos de color verde.
En el comedor, reinaba una mesa en la que se podían acomodar tranquilamente diez personas, nunca fuimos tantos, una perra que tuvimos, marco una de las patas, para siempre, con sus dientes.
Las piezas tenían piso de madera, si te levantabas a la noche para hacer alguna broma, Mamá, gritaba “que hacen, no me hagan levantar”, la madera crujía con los pasos y eso te delataba siempre.
Cierro los ojos y la recorro toda, recuerdo cada vidrio que rompí y la situación exacta. Vidrio de la ventana de mi pieza, que daba al patio: Jugando al fútbol con mi Tio Ciru. Vidrio de la puerta de la pieza de Mamá: Tirandole con un banco a mi hermana, luego de una pelea. Vidrio de la puerta que daba al patio: Tirandole un quebracho, de la salamandra, a mi hermano. Esas peleas, recuerdo todo.
Esa casa me abriga, refugio al que acudo siempre, en mis recuerdos. Daría lo que sea por volver a vivir ahí, daría lo que sea por volver a sentirme así…tan seguro, tan feliz, tan amado…

Wednesday, June 13, 2007

Voy perdiendo sentido...



Después de unas horas frente a la computadora, escribiendo algo para la facultad, las ideas pierden su sentido, las palabras pierden su sentido. Es como cuando, repetimos una palabra hasta el cansancio y se nos hace rara, nos suena equivoca. Uno se adentra en un viaje por el lenguaje, se ahoga en las palabras, juega con los puntos, salta de uno en uno en los puntos suspensivos, y cuando parece caer al vació se aferra al gancho salvador de un signo interrogante.
El tiempo se burla de uno, miras el reloj, y ves que faltan seis horas para entregar, lo que parece que nunca vas a llegar a entregar. Más cuando todo te distrae, te pasas valiosísimos minutos seleccionando la música que te acompañe, de golpe se te antoja un té y hay muchos gustos para elegir. Todo atenta contra tu concentración, el camión recolector de residuos, un despertador, una frase de Silvio Rodríguez (que resulto ser la música seleccionada), sentís caer el diario y te preguntas, como hace el repartidor para acertarle siempre a la puerta, los perros se acuerdan que son seres vivos y se ponen a ladrar, todos atentan, y sabes que el profesor no va a entender esto. Tampoco va a entender, que preferiste pasar la tarde hablando con esa chica que te vuelve loco, o el sábado jugar el torneo de fútbol con los amigos, el lunes te recuperabas de una resaca terrible, muy justificada de hecho, había que celebrar el regreso de un amigo. Al final uno es un incomprendido.
Las palabras pierden su sentido, si alguna vez lo tuvieron. Yo pierdo mi sentido. Y solo encuentro sentido, en esa foto donde se ve tu sonrisa en primer plano, y solo pido que tus te quiero nunca pierdan el sentido que les das…

Por último, les dejo una poesía de Matilde Alba Swann.

Mañana es siempre

" Cómo quisiera despertar cantando.
Pero amanezco, en cambio,
dolorida
de no haberme quedado en ese espacio,
en ese tiempo de morir prestada.
Una isla no inscrita en ningún mapa,
una célula enferma de ignorancia,
un asfixiado mundo en miniatura,
una avanzada humanidad triunfante,
en clarines y hogueras
homicidas.
Tabla sola, sin náufrago siquiera,
y luchando,
relincho hacia la costa,
y animada nomás por el recuerdo
de un aliento mordido a sus astillas.
Cómo quisiera despertar cantando,
y me muero de sed y hambre
de canto
mientras desborda la preñada aurora
en promisorio bermellón de vinos,
y expandida,
hoguera en panes, horneándose a lo alto.
Yo estoy abajo,
debajo de la historia,
sepultada en antorchas apagadas
y estandartes marchitos.
Sumergida en humores subterráneos
y en cenizas de huesos
de bandido,
Soy el ser que no fue, lo que no pudo,
la olvidada, desdeñada semilla,
pero existo.
Dentro
tengo un sauce inclinado que me llora.
Un niño triste me llama, sin nombrarme.
Me doy cuenta,
me doy cuenta, yo existo.
Mañana espero despertar, cantando. "



Wednesday, May 30, 2007

Preguntas sin respuestas...


Ando buscando esas respuestas, que me pediste, la última vez que nos vimos. Tan ambiciosas, tan pretenciosas, tan tuyas. Difícil ejercicio el de pensarse, difícil viaje el de la introspección. ¿Quien soy?, ¿Que quiero ser?, y mas difícil todavía, ¿Que quiero de vos?
La verdad es que recorro las preguntas, me recorro, en viaje imaginario por mis lugares más íntimos, y sin embargo no encuentro respuestas, solo más preguntas o, tibios indicios de posibles respuestas. Sé, lo que no soy, lo cual es un principio, Sé, lo que no seré, Sé, lo que no quiero de vos.
Me reconozco en las ganas de quedarme solo en mi casa, así puedo vestirme ridículo y cantar casi a gritos. Me siento pleno, en reuniones con amigos donde la risa es la invitada de lujo. Soy yo en mi escritorio, con unos libros apilados, llenos de señaladores, con mi corcho en la pared lleno de rostros de personas que amo y/o extraño, con mis CD de Jazz, que reposan sobre los de Sabina, que saludan amorosamente los DVD de V invasión (que tengo que devolver). Mi escritorio, con tazas con restos de Te, con envoltorios de golosinas ya consumidas, con un anotador como principal testigo del caos donde estoy inmerso, ahí soy yo, en mi mundo de dos metros cuadrados, donde me siento incomodo solo esos treinta segundos después de acomodarlo,
Que quiero… quiero terminar todos esos libros que compre y nunca empecé, aquellos que me esperan en silencio, reposando en la biblioteca. Quiero no quedarme pelado, quiero tener un perro que me haga caso, quiero mejorar como jugador de Ping Pong, quiero ver casadas a todas mis hermanas y que me den muchos sobrinos.
Que quiero de vos…no quiero nada, solo pretendo que no me pienses tanto, que me acaricies la nuca solo cuando sea necesario, que me saques de esos viajes que empiezo, y que pocas veces, tienen un destino final.

(Foto "cedida", por la caoticamente Bella, A.P.)

Por último, les dejo una poesía, de mi queridísimo Mario Benedetti.


Informe sobre caricias

La caricia es un lenguaje
si tus caricias me hablan
no quisiera que se callen

La caricia no es la copia
de otra caricia lejana
es una nueva versión
casi siempre mejorada

Es la fiesta de la piel
la caricia mientras dura
y cuando se aleja deja
sin amparo a la lujuria

Las caricias de los sueños
que son prodigio y encanto
adolecen de un defecto
no tienen tacto

Como aventura y enigma
la caricia empieza antes
de convertirse en caricia

Es claro que lo mejor
no es la caricias en sí misma
sino su continuación.

Monday, May 14, 2007

Frio azar...


Aun no recuerdo de quien fue la idea, pero recuerdo que estuvimos todos de acuerdo. Al fin y al cabo, nada teníamos que hacer aquel día. Fuimos llegando de a uno, cada uno con sus expectativas a cuestas. Creo que llegue entre los últimos, vos ya estabas ahí. Me acerque al grupo, no quería hacerlo pero verte me motivo a hacerlo, si saludaba a todos te ibas a tener que acercar a hacerlo. Claro que eso no sucedió, te quedaste sentada, alejada, sola.
El frió monopolizaba la tarde, se posaba en cada centímetro de humanidad que no teníamos cubiertos. Cuando estuvimos todos, y ya chequeada la cantidad necesaria de puchos, golosinas, música, etc., decidimos emprender el planeado viaje. Por puro azar, o por una movida planeada en milésimas de segundos, quede sentado a tu lado. Seguías en silencio, observando a todos, esbozando tímidas sonrisas. La camioneta avanzaba, la ruta iba haciendo su trabajo, por ahí alguien soltó que su pareja era un desastre, del asiento de atrás, contaron que la facultad era cosa del pasado, desde el cuatrimestre pasado, el amigo-chofer comento su angustia por no encontrar quien lo ame, las anécdotas se sucedían unas a otras, vos seguías callada, por momentos atenta, por otros, solo observando el paisaje que íbamos dejando atrás.
Hicimos una parada para aprovisionarnos de combustible y otras cosas, no tan necesarias. Coincidimos en la caja del minimercado, es increíble la variedad de cosas que uno encuentra en esos lugares, tu compra era de lo más particular, un paquete de cigarrillos, unas galletitas, unos snack, un osito de peluche y una lata de atún, me quede en silencio recorriendo tu compra, mi cara llamo tu atención, no trates de encontrar coherencia en mis actos, dijiste, y me sacaste una sonrisa, bueno, dijiste, yo hablo y vos sonreís, dos sorpresas, no?, otra sonrisa robada. El grito de, Nos vamos, nos saco de un silencio entre incomodo y magnifico.
Nos sentamos nuevamente juntos, uno al lado del otro. El frió avanzaba en la conquista del día, pero por primera vez, se sentía dentro de la camioneta. Inconscientemente nuestros cuerpos se fueron acercando, hasta quedar totalmente unidos en una fusión casi epitelial. Después de las confesiones, que la ruta le había sacado, a casi todos los integrantes de la camioneta, esta había quedado en silencio. Así el ambiente estaba reinado por el ruido del motor y por la voz melancólica de Joni Mitchell. Vos, mirabas por la ventanilla, yo, te miraba a vos. La noche fue haciéndose presente, mágicamente te recostaste en mi pecho, en silencio fuiste ganándome centímetros. Ahora los dos nos mirábamos, en silencio, nos adentrábamos en los ojos del otro, nos recorríamos, nos hacíamos cómplices.
El viaje llego a su fin, hubiera dado lo que no tenia por cien kilómetros más. Al descender, fui rápido a la habitación que se me había asignado, acomode mis cosas, pocas pero mías. Mientras miraba, acostado, el techo de mi habitación, recordé tu cuerpo pegado al mío, así que me levante y salí de mi habitación. Ahí estabas vos, habías hecho lo mismo cinco minutos antes, me esperabas sentada en un banco, me acerque y te dije… "Si ese avión deja el suelo y tú no estás en él, te arrepentirás. Quizá no hoy, quizá no mañana, pero pronto y por el resto de tu vida.”,"¿Pero qué pasará con nosotros?”, contestaste siguiendo el guión.
"Siempre nos quedará París" dije, y agradecí que los dos hallamos visto Casablanca, más de una vez.

Friday, April 20, 2007

Frases infinitas...


Podría escribir sobre, La importancia de la repetición en la obra de Gabriel García Márquez, o de, La sucesión de sucesos sucedidos sucesivamente que llamamos vida, sin embargo voy a optar por escribir sobre lo que me pasa a mí.
Me levanto y leo, "Maradona internado", "Gran Hermano el éxito de la TV", "Robo en Caballito", "Tinelli y Bailando por un sueño", "Renuncio Merlo", "Velez apuesta a los pibes", "Lalo Mir triunfa en radio", "Fidel Castro cerca de la muerte".
Me canso de leer y me pongo a hablar con mi familia, "Hiciste la cama", "Secaste el baño", "El abuelo dice cuando lo vas a ir a visitar", "Te llamo una tal...", "Cuando me van a hacer abuela", "Si dejas la facu te mato", "Como se llamaba ese chico", "Vas a salir de nuevo", "Abrígate".
Deci que uno tiene a los amigos, "Che, boludo", "Sino salís hoy te cago a trompadas", "Me pasas el teléfono de tu compañera de facu", "Que onda con esa minita", "Riquelme es lento", "¿Me desadmitiste del MSN?", "Pido otra cerveza", "A que no le sacas el teléfono a la mesera", "Esta mina me encanta".
Por ultimo, el día te lleva a la cuna de los grandes pensadores, la universidad, "¿En que aula cursamos hoy?", "Los apuntes no los compre, con los resúmenes la piloteo", "Esta materia la zafo, a pura guitarra", "El libro no lo leí, pero mi opinión es que...", "¿Y la pregunta alumno seria?", "Podemos hacer un recreito".
Un día en la vida de alguien, una serie de frases que se repiten, por los días de los días, casi hasta el infinito. O me van a decir que ninguna les sonó familiar. Sin embargo, hay una frase que me repito en silencio, solo en mi intimidad. Yo solo conozco las repercusiones de ella. "Otra vez te enamoraste de un imposible", de una bella muñeca con pulseras diría la canción...

(La imagen pertenece a la obra “Hasta el Infinito”, de la pintora mexicana Cristina Ruiz.)


Por ultimo, les dejo una poesia de Hermann Hesse, que me estuvo acompañando por estos dias.

Excursión en el otoño tardío (1919-1928)

La lluvia del otoño ha escarbado en el bosque grisáceo,
el valle tirita con el viento frío de la mañana
los duros frutos del castaño caen
y estallan y sonríen húmedos y parduscos.

El otoño también ha escarbado en mi vida,
el viento arranca hojas desgarradas
y sacudiendo va rama tras rama, ¿dónde el fruto?

Florecí amor, fue sufrimiento el fruto.
Florecí fe, y el odio fue su fruto.
Corre el viento por mis ramas estériles,
yo me río con él, aún resisto tormentas.

¿Cuál es el fruto para mí? ¿Cuál mi meta? -Yo florecía
y era mi meta florecer. Ahora me marchito
y esa es la meta, no otra cosa,
breves las metas son que el alma se propone.

Dios vive en mí, Dios muere en mí, Dios sufre
en mi pecho, y es ésta meta suficiente.
Buen camino o errado, flor o fruto,
todo es lo mismo, pues que nombres tan sólo.

El valle tirita con el viento frío de la mañana,
los duros frutos del castaño caen
y fuerte y claramente ríen. Yo con ellos.



Monday, April 09, 2007

A un año...


No me resulta fácil hablar de mí, me siento molesto, incomodo. Pero por estos días, tengo la necesidad de contar que lo extraño, a veces me miento y me digo que sigue viviendo en México, como hace unos años, pero sus postales, siempre tan graciosas, no llegan nunca.
Hace un año que no escucho su voz, tan ronca, tan llena de verdades, puñaladas de sinceridad que quisiera recibir, las necesito. Hay personas que pasan toda una vida tratando de dejar marcas en la vida de los demás, a él le vasto con 35 años, aquellos que lo conocimos lo amamos, nos dejo tanto, para algunos era "El Loco", "El Ciru", para mi fue "Tío Ciru", aquel que me enseño tanto, aquel al que le debo tanto.
Ya hace un año que no contamos con su presencia física, espiritualmente esta siempre, a cada paso se me aparece, en sueños, recuerdos, frases, anécdotas, todo me recuerda a él, y lo que al principio eran lagrimas, hoy son sonrisas. Lo recuerdo y me sonrío, cuando no me río a carcajadas, que tipo especial eras (me cuesta horrores hablar en pasado).
Tío, a un año de tu desaparición física, te recuerdo, te extraño, sigo aprendiendo de vos, sigo amándote...

Tu sobrino


Wednesday, April 04, 2007

Cartas escritas tarde

Lundi 03, Avril

Que me lleva a escribir estas líneas? La verdad es que no lo se, o más bien, no lo tengo claro del todo. Quizás en algún momento, en alguna línea, encuentre esa razón, las causas, o lo más parecido a ello.
Cortazar solía decir que, Bs. As se hizo presente de manera mas intensa, durante su estadía en Paris. Fue durante esos años, donde empezó a amar a esa ciudad, donde comenzó a soñar con ella, desearla, en definitiva, extrañarla. Quizás no tanto como ciudad sino, como conjunto de emociones, relaciones, sensaciones que traía aparejada el nombrarla, más allá, obvio, de la belleza propia de la Ciudad de Bs. As. Lejos estoy de compararme con, un genio, como Julio Cortazar pero, si entiendo y comparto esa idea de extrañar lo lejano.
En los últimos tiempos, si bien he recorrido algunas camas, he extrañado la nuestra, esa que nunca compartimos, y sin embargo desee tanto. Que me hizo acercarme a vos, no lo se, quizás esa angustia que te recorría todo el cuerpo, si bien no eras la intelectualidad en persona (yo tampoco), eras capaz de plantearte problemas de índole metafísica. Tenías experiencias de angustia, que el común de las personas, ni en su peor pesadilla imagina.
Todo se volvió anárquico desde tu partida, hasta mi forma de escribir. Todo es duda, todo es interrogante, ¿Fue una partida?, ¿Alguna vez fuiste mía?, preguntas, dudas, incertidumbre. Al fin y al cabo, nada me asegura tu regreso, y de regresar nadie te asegura que te este esperando.
Creo que alguna razón ya encontré, te extraño, me hace mucha falta eso que sentía cuando estaba a tu lado, esa seguridad que me brindaba el saber que estabas al lado mío, éramos invencibles, por lo menos eso creíamos.
Bueno, te dejo, no se bien si te llegaran estas líneas. Pero me hizo bien escribirlas, más no podía hacer, acá no para de llover y no aprendí a hacer tortafritas...

Wednesday, March 21, 2007

La verdad es que no hay verdad...


La verdad es que no hay verdad, solo intentos de alcanzarla. Aquella tarde solo intentaba alcanzar una. Me subí a unos de esos colectivos que recorren toda la ciudad, no dejan un barrio sin rozar. Espere parado hasta que se desocupara un asiento del lado de la ventanilla. Una vez sentado, me puse los auriculares y le di play a la música, nada más lindo que recorrer Bs. As de esa manera. Las calles iban quedando atrás, no así los recuerdos de aquellos ojos negros, tan vivos, tan llenos de misterio, tan lejanos, tan de otro. La verdad es que no hay verdad, me repetía una y otra vez, mientras el colectivo saludaba a un nuevo barrio en su recorrido, casi eterno. Por la ventanilla alcance a divisar a una pareja de adolescentes, se metían rápidamente a un hotel, sin testigos más que yo, no necesitan más, no necesitaban ninguno en realidad, testigos se necesitan para esclarecer un crimen, no para avalar al amor. Y si bien, no había verdad, lo más cercano, lo más verdadero en relación al amor, son los primeros intentos de alcanzarlo, el amor adolescente, el primer amor, aquel al que a uno le duele, le lastima amar tanto a otro, levante una copa imaginaria por aquella parejita. Y me acerque un paso más, a la verdad que andaba buscando.
Me dieron ganas de caminar, así que me levante y toque timbre. Al bajar el barrio me resulto algo familiar, pero no tenía porque serlo, hay edificaciones que se repiten por la ciudad infinitamente. Camine sin rumbo, un perro ladraba por una ventana, se le notaban las ganas de correr en los ojos, me quede pensando en todo lo que transmiten los ojos, ni hablar los de ella, no me decían mucho, en realidad, casi nada, pero prefería su nada, al todo de otros seres.
Me detuve en una plaza, ahí de repente, todo me pareció más claro, estaba a solo dos cuadras de su casa, el destino?, el inconsciente quizás?, vaya uno a saber. Lo que sabía es que ella me podía acercar más a la verdad que andaba buscando. Camine frenéticamente hacia su casa, en la esquina me invadió la inseguridad, el miedo, que tantas veces me habían negado acercarme a alguna verdad. No les hice caso, y avance, me detuve en el momento exacto que salía de su casa, con sus rulos tan esplendidos como siempre, al verme me disparo una de sus sonrisas a mil dientes, era la imagen misma de la belleza, en ese momento todo me cerro, alcance la verdad que andaba buscando…estaba más enamorado que nunca, y nadie, ni yo mismo, lo podía negar…

Friday, February 23, 2007

Perdedores del trio...


Refugiado entre las sabanas, te veo pasar de un ambiente a otro. Buscas tu ropa, reconstruís una noche, prenda a prenda. Sentís mi presencia, solo cuando lanzo una tímida risa al verte, por momentos, perder la lucha, que emprendes con un suéter, que no quiere que lo uses y que resulta ser mío.
La imagen es de comedia romántica europea, vos cubierta solo por aquella prenda que resulto derrotada, que a mi me queda grande, preparando torpemente el desayuno, mientras dejas ver por breves instantes lo perfecto de tu cuerpo. Yo, con la lucidez de los últimos momentos, solo te observo, cualquier palabra estaría demás, sin embargo, sé, sabemos, que hablar es necesario.
Anoche viniste a eso. Lo intentamos, solo hasta que nos preguntamos que sentíamos por el otro. Solo tenemos claro que en este triangulo, ninguno de los dos quiere ser el lado perdedor. Porque en todo triangulo alguien pierde, uno de los lados sufre una perdida. Ni vos ni yo queremos ser ese lado, pero alguien algo va a tener que perder.
Terminaste de preparar el desayuno, y si bien solo es café con galletitas, lo traes como un chef que trae su mejor plato gourmet, me encanta la entrega con la que haces todas tus cosas, si yo pudiera entregarme así. Te tiras en la cama y el bamboleo del colchón sacude, un poco, la bandeja, sin derramar siquiera una gota de café. Me das un beso, mientras me dices que le pusiste tres de azúcar, me conoces mucho, como nadie quizás, llegaste a esos lugares que pocos conocen. Le doy el primer sorbo al café, sabiendo que me miras como alguien que espera el veredicto de un jurado, esta horrible te digo, y me das uno de esos besos donde tememos perder todo el aire. Nos quedamos en silencio, temo empezar la conversación, intuyo puede ser la ultima, no quiero perderte y no se que hacer para retenerte. Vamos a tener que comprar una radio estos silencios me matan, me decís, y ante mi cara de sorpresa, agregas, vamos a trabajar tu pesimismo también, no voy a poder convivir con él mucho tiempo…

(Foto cedida por Agus, la otra A.P)
(Archivo recuperado por mi Hermani La Maga)

Monday, February 12, 2007

Mujer nicaraguense

Hoy no tengo muchas ganas de escribir (decir), pero siempre hay ganas de leer a otros y sobretodo, recomendarlos. La recomendación de hoy viene de Nicaragua, es quizás (después de A.P) la mujer que más movilizo mi mente, audaz, talentosa, con tanto por decir, tanto por contar.
Gioconda Belli, poetisa, ensayista y narradora, nació en Managua el 9 de Diciembre de 1948. Se reveló como poetisa en 1970, consagrándose en 1972 con el premio " Mariano Fiallos Gil".
Toda su obra se ha recogido en El ojo de la mujer (1986): una totalizadora combinación de la experiencia amatoria y la práctica al servicio de la transformación revolucionaria. En cuanto a sus dos novelas, ambas logradas en sus objetivos primordiales, fusiona lo erótico y lo político, lo mítico y lo poético.

Y Dios me hizo mujer

Y Dios me hizo mujer,
de pelo largo,
ojos,
nariz y boca de mujer.
Con curvas
y pliegues
y suaves hondonadas
y me cavó por dentro,
me hizo un taller de seres humanos.
Tejió delicadamente mis nervios
y balanceó con cuidado
el número de mis hormonas.
Compuso mi sangre
y me inyectó con ella
para que irrigara
todo mi cuerpo;
nacieron así las ideas,
los sueños,
el instinto.
Todo lo que creó suavemente
a martillazos de soplidos
y taladrazos de amor,
las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días
por las que me levanto orgullosa
todas las mañanas
y bendigo mi sexo.

Saturday, January 27, 2007

El tango se baila con ropa de perdición.



Nos sentamos en la mesa, con la exclusiva idea de mantenernos en silencio, mientras se desarrollaba el espectáculo. Teníamos mucho para decirnos, pero ninguno de los dos quería decir esa última frase, aquella que da por finalizada toda relación. Tanto nos unía, tanto, que nos asustábamos día a día, éramos chicos quizás, o quizás solo nos angustiaba el saber que ese era el fin, que no había mas búsqueda, justo a nosotros que nos vanagloriábamos de ser eternos buscadores.
Las luces se apagaron, y el quejido de un bandoneón lleno el salón de la confitería (como nos gustaba decir palabras que eran del tiempo de nuestro abuelos), las luces se reunieron alrededor de un estática pareja de baile. Ella, una morocha de pelo encerrado, en un tirante peinado con gomina, El, un hijo de inmigrantes alemanes, que había monopolizado sus ejercicios físicos en el área de la espalda. Se miraban extrañamente, permanecieron en una tensa calma por unos, interminables, segundos.
Al primer movimiento, de esos cuerpos, entendí porque el tango se baila con ropa de perdición, la tensión sexual que emanaba esa pareja inundo nuestra mesa. Nos acercamos en silencio, nuestros cuerpos se rozaron, se reconocieron, y la firma de la paz se dio en silencio. Me miraste, me lanzaste una de tus sonrisas, del millón de dólares, te respondí con una mueca de aprobación, y los dos nos dijimos, en una sola voz, “Solo hay que recurrir a palabras que mejoren el silencio…”

(Foto cedida por Agus)

Saturday, January 13, 2007

Buenos Aires.(recomendacion Amelia Biagioni)

Buenos Aires antiguo.
Buenos Aires bohemio.
Buenos Aires nostálgico.
Buenos Aires violento.
Buenos Aires turístico.
Buenos Aires despierto.
Buenos Aires intenso.
Buenos Aires visceral.
Buenos Aires prepotente.
Buenos Aires querido.
Buenos Aires melancólico.
Buenos Aires precoz.
Buenos Aires húmedo.
Buenos Aires multifacético.
Buenos Aires, todo eso y mucho más.
Ciudad misterio, cachetada amarga de pibe, con frió, pidiendo monedas para comer. De palabras, en idioma extranjero, oídas al pasar porque tenes solo diez minutos para almorzar. Es tango, pero espectáculo, que cada vez se parece menos al que bailaban nuestros abuelos, todo cambia pero. ¿Evoluciona? Yo no tengo esa respuesta. Buenos Aires tiene “un algo”, que hace que la ames y la odies a cada paso.
Hoy recomiendo a una poeta, fundamentalmente de lo existencial, Amelia Biagioni. La poetisa santafesina entra en el mundo de la poesía con Sonata de soledad, su primer poemario de 1954.
La escritora se traslada un día de su Gálvez natal a Buenos Aires. Una nostalgia que hasta puede tener sabor la envuelve sin llevarla a la desesperación. De la llanura santafesina al asfalto de la Capital. De la horizontalidad sosegada de su pueblo a la verticalidad por momentos asfixiante de la gran urbe.
Sin mas nada que agregar que un ejemplo del talento de esta dama, los dejo, hasta la proxima.

Torre del té

Sobre infinitos pisos y negocios,
bebo magia de té dorado.
El ventanal profundo está ofreciéndome
un abismo de pórtland delicado.

Con la liviana llave de esta altura
abro el sueño de la ciudad;
y en la tarde, los prismas angustiados
se disfuman en ancha suavidad.

Quizás son voladoras estas torres,
donde milagros se aposentan
entre palomas, torres donde viven
los que de la ternura se alimentan.

En el río, que acaso es lento beso,
mezo un barquito, y Dios, el día.
De una calle, o del rastro de mis ojos,
alzo la miniatura de un tranvía.

Y a ti te olvido, hombre diminuto
como un terroncito de fe,
porque temo que te arroje mi mano
al misterio de mi taza de té.

de La llave
(1957)