Wednesday, September 29, 2010

Caminando, pensando, masticando, escribiendo...


Evito escribir los domingos, la visión del mundo ese día de la semana no ofrece panoramas muy alentadores, por eso este texto lo vengo masticando desde el sábado a la noche. Soy de esos que están jugando un partido, escucho algo y, mientras busco la pelota para sacar un lateral, pienso que debería escribir algo que hermane esa idea con otras que me dejo la semana.

El viernes tuve fiebre, así que el sábado me desperté rodeado de papeles con textos en los que no me reconocí, al otro día jugué al fútbol con 13 desconocidos que sentí muy cercanos, levantar ciertas banderas en este país te hermana. El post lo empecé a masticar volviendo de Boedo, caminando por rivadavia escuchando música, revisando los mensajes típicos de sábado a la noche que se avecina. Tener una hora en silencio el celular me hace encontrarme con una serie de mensajes de Ella, por la que años atrás hubiera dejado todo, desde mí amada ciudad hasta la posibilidad de volver a tener perro por su alergia. Con Ella me pasa lo que no me pasa con otras, todavía no resuelvo de qué manera nos hacemos más daño, si es cuando besamos a otra gente en cercanía de nosotros o cuando nos besamos nosotros.

Caballito de noche me parece un barrio encantador, salvo por el Parque y sus rejas, un sábado a la noche hasta el transito es amable, las luces le dan un marco a la avenida que acompañado por mi mp3 con una selección de temas me lleva a pensar en muchas cosas. Al llegar a Acoyte me acuerdo de cuando reconocí la risa de mi ex entre la multitud que cruzaba esa esquina un día de semana, esbozo una sonrisa, es increíble como al pasar los años, van pasando los barrios, las ex, las anécdotas, la ciudad entera sangra recuerdos.

Y tanto caminar, tanto avanzar, que pensar en el futuro se hace inevitable. Y con este tengo mas sentimientos contradictorios que con el pasado, y no es poco, porque lo veo destruyéndose noche a noche incluso antes de formarse, porque se pierde en un vaso y entrega un beso que no debería ser dado, porque una noche cualquiera cansado de atender el teléfono de la soledad hace la llamada que nunca debió hacer, porque una tarde de domingo cansado de un fútbol sin goles sale a patear junto a los abrazos del ayer. Pero a la vez, el futuro es una charla de domingo a la madrugada con un pibe que ya casi se siente amigo, el futuro son esos catorce desconocidos, que viajando desde el norte, el sur y el oeste se juntan en Boedo a disfrutar de una tarde fútbol e ideales, el futuro es este masticar unas ideas con la sensación de que en un tiempo no muy lejano serán algo mas que un puñado de palabras, al fin y al cabo, se trata de día a día ir masticando la realidad que nos toca vivir…



La recomendación de hoy es la poeta argentina Mariel Manrique, su obra la pueden encontrar en http://pajarodechina.blogspot.com/



X

La certidumbre de tu amor sereno
me sostiene esta noche.
Porque nuestros padres ya no están aquí.
Porque no hemos tenido hijos que reciban
nuestra modesta y entrañable biblioteca.
Porque nos tenemos a nosotros mismos.
Sé la brújula de mi estremecimiento.
No soltaré tu mano. Escudaré tu nuca.
Tu ternura me infunde este vestido blanco.
Mi perseverancia diseña tu sombrero.
Silencian las agujas enterradas
en las muñecas vendadas de la veteranía
que nos han dedicado ciertas guerras.
Sobre esta tierra bailan los flamencos
de ese cuento que nos gusta leer.
El bosque retrocede, suspendido.
Miro la casa de hilos que supimos fundar.
Veo las vendas que habrá que merecer.
El que no baila se ofrece al sacrificio.
Mañana ellos saldrán de cacería.
Tengamos hasta el último minuto
el desclasado aliento de las flores sin nombre,
la inocencia inconsciente de los flamencos.


2 comments:

Anonymous said...

Es cierto que la ciudad sangra ex, es terrible ver como los lugares quedan marcados, hasta en algunos casos veo fantasmas del pasado que reviven una y otra vez, al igual que en la invención de Morel, la misma situación.

Anonymous said...

Pará, toda esta emoción por el picado nac&pop? o entendí cualquier banana? tan grosso fue? saludos